Comparecencia de la titular del Inmujeres CDMX ante la Comisión de Igualdad de Género de la Primera Legislatura del Congreso de la Ciudad de México.

Publicado el 06 Noviembre 2018

Discurso 31, 2018
Dra. Teresa Incháustegui Romero
Directora general del Instituto de las Mujeres de la Ciudad de México
Comparecencia de la titular del Inmujeres CDMX ante la Comisión de Igualdad de Género de la Primera Legislatura del Congreso de la Ciudad de México.
Salón Heberto Castillo del recinto legislativo


PRIMERA INTERVENCIÓN

Muchas gracias, diputada Paula Adriana Soto Maldonado, presidenta de la Comisión de Igualdad de Género de este Congreso de la Ciudad de México. También agradecer la presencia de todas las diputadas y todos los diputados integrantes de esta comisión.

El Instituto de las Mujeres de la Ciudad de México es una institución que tiene una gran cantidad de atribuciones, son en su mayoría atribuciones fuertes, porque desde la Ley del Instituto que lo crea, en el que se mandata promover e instrumentar las condiciones necesarias para la plena vigencia y goce de los derechos humanos de las mujeres, es un mandato que debiera ser asumido directamente por el Gobierno en pleno de la Ciudad, porque generar condiciones para el pleno ejercicio y goce es en realidad una tarea magna que requiere el concurso efectivamente de todo el gobierno.

Por eso, también está planteado como el órgano fundamental de la transversalidad de toda la política de igualdad, para definir, dar seguimiento y evaluar las acciones afirmativas que se requieran en cada ámbito, para emparejar el piso de la desigualdad de género y que las mujeres y niñas de todas las edades y de todas las condiciones podamos acceder a estos derechos.

Tenemos entre nuestros mandatos: fomentar la participación social, promover la coordinación de acciones, promover la participación política, promover la paridad, la igualdad en puestos, hacer estudios, estadísticas, consultas y difundir la cultura de la igualdad.

También tenemos un mandato muy fuerte en materia de la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, porque tenemos que coordinar la política y dar también seguimiento, desarrollar instrumentos, etcétera.

El Instituto realmente tiene una tarea enrome y cada vez que hay un problema, algún asunto que surge dentro de la población femenina, dicho sea de paso somos la mayoría en la población de la ciudad, somos una de las entidades feminizadas, obviamente la gente voltea a ver al Instituto pidiendo que participe, actué y con todos esos mandatos que tenemos muy fuertes, muy importantes, por cuanto tocan a más de la mitad de la población, cuando vamos a ver los recursos que tenemos como institución, pues resulta que solamente tenemos el .7 por ciento del 1.5 por ciento de los recursos del Resultado 13, que es lo que nos toca.

Es decir, el Instituto tiene pesos más pesos menos para su ejercicio, un equivalente aproximadamente en términos redondos a 160 millones de pesos, para el 52 por ciento de la población, para las políticas de acciones afirmativas y de igualdad,

Para la mitad de la población, no necesitamos tener la mitad del presupuesto, pero sí tendríamos la posibilidad de direccionar muchas de las políticas que tienen que ver con la población. Sin embargo, eso también está acotado y está acotado por el mismo Resultado 13, que es un paquete completamente restringido de recursos y que además ni siquiera todos están dirigidos realmente a la política de igualdad, por lo cual tenemos que en realidad el Resultado 13 sólo le pega al 25 por ciento de todas estas acciones.

Además, el hecho de que el Instituto sea un órgano autónomo por fuera, o sea con un nivel de dirección general, pues le da también pocos recursos de poder político para sentarse al Gabinete, para plantear la línea de acción en el Gabinete, de manera que estamos siempre dependiendo de la voluntad, o sea del palancazo del Jefe de gobierno para salir adelante.

Debo decir que en cuatro años de estar al frente del Instituto, en los momentos más críticos, fue esa palanca la que nos dio la posibilidad de hacer ese avance, pero vivimos holgadas de la línea pidiendo el apoyo, porque institucionalmente somos una institución que requiere justamente subir el nivel de la jerarquía de las atribuciones para que pueda realmente, con ese poder de autoridad, tener una injerencia real en ese eje trasversal del desarrollo que es la igualdad entre hombres y mujeres.

En ese sentido yo le puedo dar datos del porcentaje que tenemos del presupuesto global, que mientras ha crecido el presupuesto para toda la ciudad, ha decrecido porcentualmente nuestro presupuesto: en el 2007 nosotras teníamos el 11.4 por ciento del presupuesto, en el 2017 el 6.7 por ciento y en el 2018 el 7.0 por ciento, sí hay necesidad de un tema de mayores recursos.

Otra cuestión importante, el diseño del Instituto y esto lo digo porque es muy importante tomarlo en cuenta, con este diseño que ustedes están planteando para la nueva institución, el diseño del Instituto es un diseño híbrido que no concentra los recursos en las funciones fuertes del Instituto, que es justamente la transversalidad, el direccionamiento de los programas, que son el desarrollo del conocimiento y diagnósticos para orientar las políticas, para decir en dónde se requiere efectivamente acción afirmativa, qué tipo para cada segmento de población femenina: indígena, de la tercera edad, niñas, etcétera.

Y tener además esa fortaleza sino que la mayor parte del recurso humano y también del recurso financiero del Instituto se va para las Unidades Delegacionales que proveen servicios.

El Instituto fue creado en el 2001 y a su alrededor fue creciendo una política social que poco tenía que ver con la política de igualdad, se trata de igualdad social pero no con perspectiva de género, de manera que el Instituto fue quedando chico frente a todo el crecimiento de la política social y sin muchas injerencias sobre los programas sociales, las reglas de operación de los programas sociales.

En ese sentido, hace falta revisar todo esto y también el tema de la estructura, decidir si el nuevo órgano que ustedes quieren crear va a ser un órgano de servicio o va a ser un órgano de dirección de políticas, porque cuando está la mixtura, se requieren muchos recursos para poder tener los dos hemisferios cerebrales armonizados o se nos terminan yendo por algún lado.

Creo, sin falsa modestia, tampoco en afán adoratorio, pero sí con una gran satisfacción personal y también reconocimiento a mi equipo, quiero decirles que en ese plano desde el 2014 recogimos la estafeta de un Instituto debilitado, que había perdido incluso visibilidad política, que estaba conflictuado laboralmente.

Y fuimos reconstituyendo la presencia política del Instituto, las relaciones internas laborales, cambiamos de sede, creamos un módulo para entender, el Instituto no tenía un lugar donde prestar atención a mujeres, ahora tenemos el Modulo del Centro Histórico.

Recuperamos el programa de Viajemos Seguras, que estaba también golpeado por la crisis del Metro, y lo relanzamos junto con ONU Mujeres a un programa con cinco componentes que está reconocido nacionalmente como la punta de lanza del programa Ciudad Segura en México y además con reconocimiento internacional.

Tenemos un fuerte trabajo en fortalecimiento de mecanismos de seguimiento, de sistematización, de informatización, tenemos un sistema que concentra la información de todas las mujeres atendidas en el instituto, y lo tenemos ya organizado desde el 2012, incluso de años anteriores hay también información.

Tenemos una plataforma para el Programa de Igualdad Sustantiva, que le da seguimiento al presupuesto y que logramos con una nueva metodología, esto es importante para ustedes, logramos identificar hasta el 32 por ciento de los recursos que se destinan a mujeres en la Ciudad de México y que pensamos que con esa nueva metodología podamos dar seguimiento y hacer que todo ese presupuesto pueda ser dado como parte de la política de igualdad sustantiva, dar seguimiento y evaluar las acciones qué tanto contribuyen. Esa plataforma ya existe, está funcionando.

Tenemos la creación de las Unidades de Igualdad Sustantiva, con funciones muy determinadas en términos de ser auténticos enlaces, tanto en la construcción, como en el seguimiento de los programas de igualdad, de la capacitación y todas estas cuestiones que están ligadas a este seguimiento de la política.

Pasamos de la capacitación presencial a una capacitación en línea, en donde hemos multiplicado muchas veces nuestras capacitaciones.

Tenemos además uno de los instrumentos actualmente reconocidos en toda América Latina como muy importante y muy pionero, que es la Red de Información de Violencia contra las Mujeres, con la cual tenemos enlazadas una plataforma con un sólo registro, a más de 800 ventanillas de atención en toda la ciudad parta mujeres víctimas de violencia.

Sistematizamos esta información, es muy importante porque fuera de las encuestas, que generalmente tienen una representación a nivel de ciudad, pero no a nivel de delegación, fuera de las encuestas de INEGI, en realidad nosotras no teníamos ningún mecanismo para saber realmente cuántas personas estábamos atendiendo por violencia, cuántas llegaban, qué tipo de problema presentaban, bajo qué situaciones de riesgo se encontraban y lo que menos sabíamos, era cuál era el tipo de canalización que se les daba y si esa canalización correspondía o no con su problema.

Todo eso lo podemos hacer hoy, lo podemos conocer hoy a través de la Red de Información que la echamos a andar el 18 de julio y que en todos estos meses, agosto, septiembre y hasta el 29 de octubre, tiene aproximadamente como 70 mil registros de personas que han acudido a pedir servicios, en cualquiera de estas ventanillas de las 8 instituciones que la Ley de Acceso establece para dar atención a las mujeres de todas las edades que ocurran en esa situación.

La Red también permite identificar a las víctimas recurrentes, y aplicarles una cédula de registro que permite saber el nivel del riesgo de violencia feminicida que pueda tener, porque sabemos que el ámbito más importante de violencia en la ciudad es el ámbito de la violencia familiar.

En donde se da todo tipo de violencia física, patrimonial, emocional, sexual y feminicida, porque a diferencia de lo que pasa en otras entidades del país, sobre todo en las entidades del norte, en la Ciudad de México la mayor parte de los feminicidios vienen por parte de parejas y no de desconocidos, como ocurre por ejemplo en Chihuahua, o en otros estados, en ese sentido tenemos en el tema de la violencia en el ámbito familiar un desafío muy grande.

¿Cuáles son desde mi perspectiva los desafíos que tendríamos que enfrentar? El tema de la coordinación efectiva de los servicios de atención a la violencia, no necesariamente tiene que unificarse, pero sí coordinarse mejor.

Por diagnósticos que hemos hecho, sabemos que a pesar de que hay población que tiene de 10 a 13 años de estar laborando en las dependencias atendiendo violencia y de los cursos que hemos dado, no hemos llegado efectivamente a lograr el tipo de persona y de sensibilidad, el conocimiento que mejore la calidad de la atención.

Ese es un desafío muy importante, mucho más ahora con las alcaldías, porque aun cuando las unidades territoriales del Instituto, que tiene una en cada delegación, han sido coadyuvantes para la responsabilidad que las delegaciones, hoy alcaldías, tendrían que tener al respecto, déjenme decirles que hay muchas delegaciones, hoy alcaldías, que tienen cero servicios de atención en el tema.

Nosotros tenemos un mapa de servicios que hicimos, que está también a disposición, ahorita lo vamos a presentar, en donde veremos dónde está, en cada mapa sabemos qué hay, en algunos lugares lo que encontramos fue una silla para que la señora se siente allí, pero no condiciones para que llegue realmente a hablar de su problema y ser tratada como debe.

Ahí también hay un gran desafío a desarrollar servicios, convocar organizaciones de la sociedad civil que puedan coadyuvar, porque el problema de la violencia en la Ciudad de México es un problema que afecta al 60 por ciento de las mujeres que declararon haber sufrido alguna vez violencia en su vida y al 38 por ciento que le ocurrió en el último año.

Dentro de este tema, las mujeres que no tienen empleo, que no tienen posibilidades de generar ingresos, algunas de las cuales son mujeres que tienen movilidad cero, porque no pueden salir de sus casas por falta de trasporte.

Los datos nos muestran que son las entidades más alejadas de la ciudad en donde están las mujeres que sufren recurrentemente violencia y los programas sociales no están hechos para el perfil de estas personas y sus necesidades. Hay que revisar todo eso y es parte de un desafío muy importante que se tiene en la ciudad.

El programa Ciudad Segura, que fue un programa muy importante, en términos de poder cruzar el trabajo de 41 instancias: la Agencia de Gestión Urbana, la Secretaria de Movilidad, los CETRAM, el Metro, las empresas públicas de trasporte, etcetera, eso fue un trabajo muy importante porque en cada entidad, en su programa de trabajo buscamos los puntos donde podría articularse el programa.

El programa tiene 5 componentes, Viaja Segura, que es todo el tema de la separación de asientos, de la reserva de asientos, de la señalización de asientos en autobuses que se hizo un gran esfuerzo, una gran inversión para nuevos autobuses, para esos asientos reservados.

También en los CETRAM se hizo una labor de generar baños para mujeres, lugares específicos donde ellas pudieran estar.

Estos son los componentes del programa, tiene el camioncito que es Viaja Segura, el otro es Camina Segura, que es todo el tema del modelo de movilidad con la calle completa; el componente de la Participación, tuvimos 9 proyectos con 9 delegaciones para trabajar espacios seguros.

Y toda la parte de una aplicación en celular que se llama Vive Segura CDMX, con la cual atendemos también cuando hacen llamadas de emergencia. Todo este trabajo que se hizo puede caer sino se logra otra vez sentar a todos los participantes de este programa y volver a hacer el cruce de sus acciones con los objetivos del programa.

Incluso cuando un titular se va, los programas se caen, mientras la autoridad entiende, se suma y se sensibiliza, por eso en ese sentido, creo que es importante fortalecer los mecanismos de coordinación para que puedan seguir adelante estos temas.

En la parte también de la Difusión se hizo el esfuerzo de integrar un sólo mensaje, con todos los recursos de todas las instituciones que se generan para tener un solo mensaje.

En la parte de la transversalidad, tenemos las 33 Unidades de Igualdad Sustitutiva, tenemos todo el trabajo que se hizo en el análisis de las reglas de operación de los programas sociales y se entregó a EVALUA DF una propuesta para revisar las reglas de operación con perspectiva de género.

Eso es un avance también en la parte de la transversalidad, se entregaron componentes de género de la parte del Programa de Medio Ambiente y en el tema de la Reconstrucción entregamos una propuesta para que hubiese un programa de reconstrucción con perspectiva de género, construcción de vivienda.

En la capacitación como decía, incrementamos 5 veces el volumen de la capacitación que teníamos anteriormente.

Sé que quieren hablar de algunos otros temas, así que yo preferiría en este momento, cerrar esta descripción general para que en función de sus preguntas podamos ir avanzando en temas concretos.

SEGUNDA INTERVENCIÓN

Muchas gracias, diputada Alessandra Rojo de la Vega Piccolo por su comentario.

Quiero comentarle un par de cosas, además de darle la información sobre la Red que me pide.

En la Ciudad de México justamente notamos que las políticas de igualdad de género que se habían implementado sobre todas las administraciones anteriores se concentraban a trabajar sobre la población adulta, incluso ni sobre la población de adultos mayores, ni sobre la población de menores de edad, entonces una de las principales cuestiones que hicimos fue incorporar una línea de trabajo con las niñas y adolescentes en una visión que primero llamamos “Las Niñas de mis Ojos”, en el sentido en que la ciudad entera volteara a ver a las niñas.

En la idea como se dice, una no nace mujer sino que se hace mujer a partir de estar aprendiendo los patrones y conductas de subordinación que se nos van enseñando, entonces nosotras comenzamos a trabajar con niñas y adolescentes para formarlas en el ejercicio pleno de sus derechos y capacidades, para que pudieran crecer y hacer lo que quisieran.

Entonces ya llévanos tres años consecutivos trabajando con UNICEF un programa de promoción de los derechos de las niñas e incluso tenemos ya dos generaciones de una Escuela de Liderazgo de Adolescentes, de jóvenes adolescente, que a su vez se han convertido en promotoras de otras jóvenes que llegan a esta escuela de formación de liderazgos.

Este año, además tuvimos la primera Escuela para Niñas Indígenas, con la finalidad de crear un piso con el cual en el próximo año si se continúa con este programa, las niñas indígenas puedan entrar ya en la escuela de liderazgos junto con todas las demás niñas de la ciudad.

También decirles que hicimos en la ciudad el primer estudio sobre ciberviolencia que se hizo y a partir del diagnóstico, del análisis de las redes, donde efectivamente está el dato muy claro que no solamente los hombres nos agreden, sino las propias mujeres asumen los mismos calificativos para participar.

Hicimos 16 talleres en escuelas de educación media para prevenir la ciberviolencia y tenemos un programa para continuar en el plan de poder erradicar la ciberviolencia, que además ya es un tipo de violencia que ya está agregada a la Ley de Acceso, con lo cual, también este Congreso tendría que tomar en cuenta que los tipos de violencia han crecido y que tendrían que crecer las acciones y los recursos que se destinen a esta parte.

Con respecto a la Red quiero decirles que está mandatada desde que se creó la Ley de Acceso, en el artículo 4º, como una manera en que el legislador pensó que se podía articular toda vez que los servicios de prevención, de atención y de acceso a la justicia que están distribuidos en 8 dependencias y 16 delegaciones, que para efecto de que hubiese una coordinación de articulación, existiera esta Red con una Cédula de Registro Único homogénea en todas las dependencias y un Modelo Único de Atención para lograr la homogeneidad de los servicios.

La Ley se creó en 2007 y fue hasta el 2018 que logramos echarla a andar, aunque estuvimos trabajando en la construcción de la Red desde el 2015.

La Red, en el caso nuestro, es una plataforma que tiene las Cedulas de Registro Único con los datos que se aprobaron, el Modelo Único de Atención y la Cedula de Identificación de Riesgo de Violencia, cuando se ingresa un nombre inmediatamente la Red lo busca en los 380 mil registros.

Las ocho dependencias centrales subieron toda la información, hay un reconocimiento muy importante que hay que hacer, toda la información de sus registros desde el 1° de diciembre del 2012, es decir, ahorita la Red tiene toda la información de todas las víctimas de violencia que fueron atendidas en toda la administración, lo cual es un banco de datos importantísimo, que tiene por supuesto su ley de protección de datos personales, su decreto, su sistema, en donde cada entidad tiene responsabilidad de acuerdo a su competencia.

De todos estos registros nosotras podemos saber la edad de las víctimas, el tipo de violencia que padecen, las características de su agresor. Tenemos a partir de eso, la posibilidad de integrar un registro de agresores, podemos dar constancias a las personas que quieran hacer alguna denuncia e incluso tenemos la posibilidad de contestar cuando la Procuraduría de Justicia nos pregunta si tenemos datos de una occisa que fue encontrada muerta, de que hubiese presentado antecedentes de violencia, como lo establece el tipo penal y nosotras podemos decirles, sí aquí está, o no está.

Podemos saber incluso de agresores que con diferentes parejas han tenido la misma conducta agresiva. Todos estos datos sirven, no solamente para poder entender de qué tamaño y de qué características es el fenómeno de la violencia y a quiénes está ofendiendo, victimizando, sino también saber en qué medida los servicios y los programas que estamos prodigando a las personas que acuden, están sirviendo realmente o no.

Creo que a partir de la información que ya tenemos en la Red, estamos integrando un diagnostico con todas estas características y con todos los resultados, incluso de las canalizaciones que se hacen, que será una base muy importante para que la próxima titular de la Secretaría pueda evaluar o tomar decisiones sobre la base de una información sólida y no de proceso braille, como cuando una empieza, cuando no hay la información necesaria.

Quiero decirles que en ese punto, la Ciudad de México está contando con un mecanismo que no tiene ninguna entidad del país e incluso muy pocas entidades del mundo tienen este mecanismo, por esto ha tenido un gran reconocimiento a nivel internacional, en Córdoba, Argentina, en distintos foros internacionales se está reconociendo esta Red como un gran mecanismo que ya está considerada como una buena práctica para que se generalice en otros espacios.

Me perece que estoy dando respuesta a lo que la diputada Leonor Gómez Otegui estaba comentando; respecto a la diputada Quiroga, su comentario, es muy importante poder incorporar el tema de las masculinidades al tratamiento de la igualdad, efectivamente si pensamos que podemos construir solas nosotras la igualdad y sumar a los hombres pues estamos cojas.

Esto implica un problema porque no quisiéramos que los poquitos recursos que tenemos nosotras nos dividiéramos también con los hombres, con otros grupos de la diversidad, creo que tienen que tener sus recursos, me parece que hay ejemplos muy buenos, ahorita incluso hay un congreso de masculinidad en la ciudad, en donde vienen grupos de varios países de América Latina, en donde la escuela de igualdad para hombres es muy importante.

En el tema de salud es muy importante que se pueda revisar la ley de PAICMA, nosotras hemos estado en la idea de hacer alguna propuesta, pero al final nos ganaron los tiempos, una ley del cáncer general de mujeres, porque hay más mujeres que mueren pon cáncer de mama, cervicouterino y de útero, que por feminicidio.

Es bastante más fuerte la mortalidad y es una mortalidad que ataca a las mujeres jóvenes, que incluso desde el punto de vista de la perspectiva de la Ley General de Acceso, se puede considerar como una violencia feminicida institucional, porque muchos de estos cánceres, sobre todo el cervicouterino que proviene del papiloma, es perfectamente prevenible, entonces es muy importante.

Ahora, en los términos de la Alerta de Género, quiero comentarles que efectivamente hasta este momento, primero tenemos que entender que hay varias cifras que se manejan como feminicidio, el feminicidio es un tipo penal, que las muertes por feminicidios son aquellas que son investigadas, juzgadas y sentenciadas como feminicidios.

Son una parte de todas las muertes violentas de mujeres por presuntos homicidios, porque las muertes se dividen en muertes naturales y muertes violentas, de las muertes violentas por presuntos homicidios que todavía no sabemos si son feminicidios o no hasta que se sentencia, la Ciudad de México está en el nivel 20 en todo el país, no porque estemos mejor, sino que las entidades están peor, si seguimos en ese lugar 20.

Ahora bien, la alerta de género fue ya evaluada, incluso por un grupo de expertas francesas que señalaron lo mismo que yo señalé, que no es eficiente para detener la hemorragia, que efectivamente sí sirve la alerta de género, sirve para que los gobiernos hagan lo que no han hecho en muchos años, para que atiendan lo que no han atendido en años, en el caso de la Ciudad de México tenemos mucho avanzado, pero claro que también la alerta nos sirvió y nos está sirviendo en este momento para sacar cosas que se nos habían atorado, para dar el empujón definitivo.

Ahora, no es el Instituto de las Mujeres, ni en la ley federal ni en la local, a quien le toca declarar la alerta, no tengo atribuciones como directora para hacerlo, la ley local lo que dice es que recibe la solicitud de organizaciones, yo no puedo solicitarla, yo recibo las solicitudes, se les da entrada y se inicia el proceso.

El papel que puede hacer el Instituto y la ley local es el mismo que hace la CONAVIM en el modelo nacional, la CONAVIM en el caso nuestro, ahorita estamos, justo en el momento en el que se está concluyendo el periodo que se otorgó y entregar el informe final, el informe final será revisado por el grupo de trabajo que revisa todo y que ahí se determinará qué es lo que ocurre, si se va a declarar o no, hay un procedimiento más o menos largo que está en esa parte.

MENSAJE FINAL

Voy a comenzar con el tema presupuestal, es algo muy importante para ustedes, el presupuesto que hay para el programa de igualdad sustantiva no está identificado, lo que está identificado es el llamado Resultado 13, que desde que se creó se estableció como el presupuesto para las acciones afirmativas que tenían que ver con el tema.

Sí usted ve ahí, el presupuesto de Resultado 13 pasó de 1.8 miles de millones en 2014 a 2.1 en 2018, eso es lo que hay para acciones afirmativas. En la elaboración que hicimos de una nueva metodología, cuando cruzamos los recursos que erogaban en las dependencias, por el tipo de acción que tenían y ver si caían en algunos de los casilleros de las políticas de igualdad, logramos identificar hasta el 32 por ciento.

Pero es un recurso que como no está identificado para las políticas de igualdad, no tenemos injerencia en él, nosotros tenemos injerencia en este Resultado 13 que es al que le damos seguimiento, pero como comentaba al inicio, estos recursos solamente le pegan al 25% de las metas del Programa de Igualdad, así que no hay realmente puestos en el proceso de transversalidad a todo el resto de recursos que sí podrían administrarse.

En realidad, puede hacerse solamente con una disposición de la Secretaria de Finanzas y de esta soberanía, para que se haga así y entonces sí vamos a poder tener toda esa masa de recursos para poder dar seguimiento a la transversalidad. Sin eso, no hay transversalidad más que en estas cifras que están aquí.

Segundo, respecto al tema de la investigación de todos los homicidios de mujeres como feminicidios como los señala la Corte, efectivamente eso ha sido una cuestión que no se ha cumplido así por parte de todas las fiscalías de la Ciudad de México y eso es realmente lo que justificó y motivó la alerta de género.

En este momento, se elaboró ya el protocolo de feminicidio que viene con la propia observación de las víctimas, de los familiares de las víctimas y de las organizaciones solicitantes, que es el que se está revisando.

Del total de medidas de la alerta, tenemos cumplidas casi el 90 por ciento de las 6 urgentes, pero hay medidas que no se pueden cumplir en 6 meses, que requieren muchísimo más tiempo para poder cumplirse.

Todo lo que son protocolos, todo lo que son paquetes legislativos, todo lo que fueron las cosas que pudimos hacer, las estamos haciendo y terminando, pero me están pidiendo procesos de muy largo plazo e insulso reestructuraciones orgánicas que ahora, para la Procuraduría, por ejemplo, recursos, programas de recursos de capacitación que requieren muchísimo más tiempo y que nosotros en este momento no podemos hacer, pero que esperamos que el gobierno próximo sí concluya.

Tocaste un punto, diputado, muy sensible para mí y con esa cita, porque yo no vengo del activismo social, yo vengo de la academia y como académica tengo muy claro, soy académica además en carreras de género, en maestrías de género, tengo muy clara diferencia entre lo que es el movimiento por la igualdad de las mujeres que tiene que ver con la igualdad de género y los movimientos por la identidad sexual, son movimientos completamente distintos.

No es semejante el movimiento de la lucha por la identidad sexual que estoy absolutamente de acuerdo, siendo yo además lesbiana, pero lo hago de una manera completamente diferente sobre el tema de la desigualdad de género, que es una desigualdad estructural, no es un tema de identidad, es un tema de desigualdad estructural.

Nosotras, o sea, yo soy además desde el punto de vista teórico, soy materialista, soy feminista materialista y entonces para mí la desigualdad tiene que ver con tres elementos fundamentales que hacemos las mujeres en el mundo de los hombres: los servicios de la sexualidad, los servicios de cuidado y los servicios de reproducción.

Esas son tres bases fundantes en las cuales se ha basado nuestra desigualdad. Mientras que la identidad sexual, un hombre puede cambiarse y ser una mujer trans completamente, pero eso no la va a convertir en una mujer psíquicamente, ni la va a obligar a dar servicios de cuidado, ni de reproducción, no lo va a hacer, o sea no lo va a hacer, y ahí hay una diferencia. Yo sé que estoy estocando un tabú, pero como académica me lo aviento.